Los accidentes siempre ocurren por un motivo. De hecho, suelen ocurrir por una serie de ellos. En el caso que os traemos hoy, dichos motivos existen. Pero estamos lejos de saber cuáles han sido.
El siniestro en cuestión ocurrió en Australia y el protagonista es un Toyota Supra. En este caso, uno de cuarta generación. En el vídeo que acompaña este artículo podrás ver cómo el conductor pierde incomprensiblemente el control en un tramo de vía que no entraña ningún peligro y cómo el coche acaba saliendo de la calzada.
Al parecer, el conductor del deportivo japonés giró con violencia a la izquierda, lo que hizo que la parte trasera se descontrolara, perdiera el control y se dirigiera irremediablemente hacia un terraplén desde donde el coche salió catapultado. El Supra acabó aterrizando cuatro metros más abajo y aunque parece que no tiene muchos daños, estamos seguros de que sí los debe de tener tras semejante vuelo.